- Área: 5600 m²
- Año: 1995
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Fotografías:Guy Wenborne
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Proveedores: Nuprotec, Procobre, Tradema
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Se trata de dar lugar al descubrimiento del medio ambiente natural y cultural de la Patagonia, en el Parque Nacional Torres del Paine, una reserva planetaria de belleza intocada.
La arquitectura establece un vínculo entre la ciudad y la naturaleza, entre lo medido y lo incalculable.
La arquitectura del hotel se basa en las siguientes ideas:
Funda un interior que permite vivir con libertad inmersos en la brutalidad del lugar donde antes no había nada construído, y hace patente su virginidad.
Como el pedazo de playa que aparece cuando la ola se retira, la arquitectura es recogerse en la interioridad del hotel, en una invitación a demorar el tiempo, y hacer una pausa fecunda entre paseos por un espacio frío y sin fin.
Detenerse, atraídos por el constante cambio de luz y de vistas, como ante las formas que hacen y deshacen, el fuego o el mar.
La tradición de la Patagonia es hacer refugios; interiores que acogen al calor de sus dimensiones reducidas.
Crear obras, como los galpones de esquila, que se instalan en el paisaje, con la seguridad que les da no pretender nada menos, que ser plenamente lo que son.
Un interior protector, con dimensiones de resta.
Una economía de formas, para fortalecer el formulario principal.
Y, sin embargo, una arquitectura imposible entender a primera vista.